El estudio ´Educación y bienestar financiero, tarea pendiente en Ecuador y la región´, publicado por la Red de Instituciones Financieras de Desarrollo (RFD), reveló que la mayoría de ecuatorianos no tienen un manejo correcto de sus gastos, deudas y no logran ahorrar.

Esta situación se explica porque el 53% de los ecuatorianos cubren sus gastos cotidianos con préstamos. Esto detiene su capacidad de ahorro, pues deben pagar el monto gastado más los intereses generados cada mes.

De hecho, 62% de ecuatorianos no tienen una conducta de ahorro. Esta realidad evita que las personas puedan:

• Enfrentar situaciones externas como una enfermedad.
• Cumplir metas financieras, como comprar una casa o un negocio.
• Acceder a productos financieros seguros.

En el país, tres de cada diez personas que forman parte de la Población Económicamente Activa tienen un empleo adecuado y ganan el salario básico de 425 dólares al mes como mínimo. A esto se suma que el nivel de educación financiera es reducido. Es decir, que la ciudadanía no tiene los conocimientos básicos para tomar decisiones financieras sensatas.

Estos conocimientos contribuyen a reducir la pobreza, porque las personas toman mejores decisiones sobre su ahorro e inversión, manejan mejor las deudas, planifican su retiro y acumulan mayor riqueza.

Ecuador alcanza los 57 puntos sobre 100 en el nivel de bienestar financiero, lo que lo convierte en uno de los países con niveles más bajos de Sudamérica. Para elevar este índice, se debe fomentar la educación financiera, pero también mejorar el entorno económico y social.

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